Bogotá.- El empresario Byron López Salazar falleció en las últimas horas en Bogotá a los 84 años de edad, víctima de diversas afecciones en su salud que lo postraron durante más de una década en una silla de ruedas.
Nació en Pereira, Risaralda, en mayo de 1937, y era hijo de Francisco López Echeverry, un reconocido sastre que tenía su negocio en la antigua Galería de la capital de Risaralda, y de Elvia Salazar Gómez.
Estuvo casado con María Paulina Espinosa Morales, promotora de negocios de arte de Byron López, nacida en septiembre de 1942 (hija de Honorato Espinosa Ponce de León (nacido en febrero 1902) y Elena Morales Rivas (nacida en 1908 en Bogotá). Conocida como ”Pum Pum”, María Paulina ingresó a la política con el alcalde de Bogotá, Hernando Durán Dussán.
Tuvieron tres hijos: Mauricio, Paula y Fernando José López Espinosa
Por su origen pereirano, Byron López Salazar fue muy cercano del expresidente de Colombia, César Gaviria Trujillo, y en los recientes gobiernos sus servicios de aviación, especialmente de helicópteros y vuelos ejecutivos, fueron ampliamente contratados.
Sus primeros negocios y el origen de su fortuna se explican históricamente en los años 70s en los negocios de obras de arte, pero su nombre apareció como una especie de “eslabón perdido” en las maniobras de toma de control del Banco de Bogotá por Luis Carlos Sarmiento Angulo y luego de la Corporación Financiera Colón y el Banco Comercial Antioqueño.
Llegó a controlar una cuarta parte de la Corporación Financiera Integral luego de la toma de su antecesora, la Corporación Financiera Colón (que era entre otros de Colseguros, de Morris Harf – si el mismo de la reventada Atlantic Coal, de Jaime Glottman – quien montó una pirámide y huyó a Israel – Antonio Ronderos, entre otros).
Tras una puja interna, en julio 20 de 1988 la Corporación Financiera Integral terminó intervenida por la Superintendencia Bancaria después de que fue sometida a múltiples transacciones irregulares por, entre otros, los socios de la comisionista Valores Integrados, de los hermanos Humberto (en la Junta de la Shaio), Augusto (luego al frente de la Drummond)y Santiago Jiménez Mejía, Rodrigo Escobar Silva y Rodolfo Prieto Díaz.
En 1981 Valores Integrados apareció como una de las intermediarias de la compra de acciones en la guerra de Luis Carlos Sarmiento Angulo para quitarle el control del Banco de Bogotá al Grupo Bolívar. El nombre de Byron López apareció en múltiples transacciones y documentos. Finalmente la comisionista Valores Integrados – que usó la captadora pirata Promociones Escort – fue intervenida por la SuperBancaria y sus cabezas visibles huyeron fuera del país y luego fueron condenados, algunos.
Byron López fue dueño de Vertical de Aviación, una compañía integrada por una flotilla de helicópteros rusos, manejada por su hijo Fernando José López Espinosa, una de las mayores contratistas de las Fuerzas Militares de Colombia (por ejemplo la vigilancia del sistema de oleoductos en Colombia) y prestó servicios en Afganistán, Brasil, Bolivia, Perú, Ecuador y México.
Fue creada en 1982 como Helitaxi y en 2002 se convirtió en Vertical prestando también diversos servicios a petroleras (apoyo a sismografía, por ejemplo) .- Petrobras, BP, Ecopetrol – y empresas del sector de la energía (tendidos eléctricos) – Interconexión Eléctrica -, y transporte de ejecutivos.
Participó en la construcción del Oleoducto Caño Limón – Coveñas (de 773 kilómetros), en la construcción del Oleoducto Central de Colombia – Ocensa (780 kilómetros), en la construcción del Oleoducto Neiva – Puerto Berrío y trabajó con Ecopetrol en la exploración y perforación de campos y pozos petroleros en Colombia, así como los ubicados mar adentro (Chuchupa en La Guajira).
El nombre de Byron López fue muy polémico y en varios de los conocidos documentos de los Wikileaks fue mencionado como un “conocido blanqueador de dinero”, se aseguró en documentos de inteligencia en Estados Unidos de que su nombre apareció ligado a unos 20 expedientes, pero nunca hubo una acusación formal. Su aparición en los Wikileaks se debió a un contrato entre el Gobierno de Estados Unidos y Vertical de Aviación para prestar servicios en Afganistán.
“…BlueLanternOff verificó que la DEA tiene información despectiva sobre Helitaxi, el nombre anterior de Vertical de Aviación. La DEA confirma que el propietario de Helitaxi, Byron López Salazar, es un conocido blanqueador de dinero. Se encuentra indexado en 20 expedientes de casos de la DEA. Sin embargo, el registro del negocio colombiano Vertical de Aviación no incluye a Byron López Salazar como propietario, aunque sí lo hace un cheque de Dunn & Bradstreet.
Según funcionarios de Vertical de Aviación, el propietario actual es Mauricio López Espinosa, hijo de Byron López, y el director general es otro hijo, Fernando López Espinosa”.