SuperFinanciera le quitó las alas al “bitcoin boyacense”, el Kmushicoin, de empresa de popó de escarabajos

SuperFinanciera le quitó las alas al “bitcoin boyacense”, el Kmushicoin, de empresa de popó de escarabajos

Tunja.- Kmushicoin, conocida popularmente como el “bitcoin boyacense” o el “boyacoin”, fue lanzada el 24 de agosto del 2019 como la primera criptomoneda colombiana respaldada por una empresa.

Fue creada por el ingeniero sanitario y ambiental de la Universidad de Boyacá, Germán Viasus Tibamoso, y por el programador venezolano, José Carmelo Campos.

Campos y Viasus

La idea era simple: Tierra Viva Bioabonos, un emprendimiento boyacense fundado en 2002 que se encarga de transformar los residuos sólidos en abono orgánico por los conocidos “escarabajos del estiércol” (coprógrafos) decidió sacar a la venta acciones de la compañía que serían pagadas exclusivamente con Kmushicoin.

Se regó inicialmente como pólvora, más como anécdota que como activo o negocio alternativo, pero con el reciente boom de las criptomonedas comenzó a aparecer en las plataformas de trading que existen en el mercado y ya se ofrece como algo que no hay que perderse: arrancó en $350 pesos y ya se cotiza en $13.650 pesos (en Crex24).

Es transada como “una criptomoneda de código abierto (opensource) … trae consigo rapidez, eficiencia y facilidad. Proporciona seguridad y beneficios a largo y corto plazo de manera fácil…”, dice su propuesta de venta.

La Superintendencia Financiera de Colombia acaba de ordenarle a la empresa Tierra Viva Bioabonos y Medio Ambiente S.A.S. reversar cada uno de los actos celebrados en virtud del contrato de venta de acciones por medio de la criptomoneda Kmushicoin (lanzada en el Centro de Convenciones de la Cámara de Comercio de Tunja).

Expidió la Resolución 0611 de 2021 que advierte que la oferta pública de valores no fue autorizada por la Superintendencia Financiera y le solicita a la Superintendencia de Sociedades analizar la situación jurídica societaria, contable y administrativa de la sociedad Tierra Viva dedicada a la investigación y la elaboración de abono orgánico por medio de escarabajos.

El nombre de kmushicoin proviene de la palabra japonesa Kabuto Mushi, que significa escarabajo de cuernos, ya que la empresa Tierra Viva, también mantiene relaciones comerciales con Japón, a donde exporta escarabajos gigantes del género Dynastes, los cuales junto con más de 375 mil especies registradas en el planeta, son responsables de la transformación de los residuos orgánicos.

De acuerdo con el contrato de venta de acción (es) de la sociedad Tierra Viva Biabonos y Medio Ambiente S.A.S., el que que reposa en la página de kmushicoin, las acciones serán pagadas y exclusivamente con Kmushicoin (KYV). En todo caso se deberá tener en cuenta el cuadro que se referencia a continuación para efectos de tener presente el valor de la moneda Kmushicoin (KTV) y de las acciones al momento en que fue lanzada al mercado:

Se aclara en el contrato que el valor de la moneda Kmushicoin tendrá un valor nominal y uno real; el primero hace referencia al precio actual de la moneda Kmushicoin y el segundo hace referencia al precio inicial de salida al mercado.

Desde su lanzamiento en agosto de 2019 a un precio de $350 pesos o USD 0.1 en 18 meses de operaciones, ha llegado a un precio de cotización en ExChanges o casa de compra y venta virtual Crex24.com de $13.650 pesos O USD 3.9.

Hoy cuenta con un volumen transaccional considerable en varios países como: España, Japón, Estados Unidos, Brasil, Colombia, Rusia, entre otros.

Actividades económicas que cubre el objeto social de Tierra Viva Bioabonos:

9103 Actividades de jardines botánicos, zoológicos y reservas naturales

6614 Actividades de las sociedades de intermediación cambiaria y de servicios financieros especiales

8299 Otras actividades de servicio de apoyo a las empresas n.c.p.

Con la decisión de la Superintendencia Financiera de Colombia, Tierra Viva Bioabonos tiene un plazo de 90 días para reversar todos los contratos de venta de acciones con Kmushicoin. “De no cumplirse con lo ordenado en la presente Resolución, la Superintendencia Financiera de Colombia tendrá la facultad de adelantar las actuaciones administrativas a que haya lugar, incluyendo la facultad de imponer las sanciones establecidas en el artículo 53 de la Ley 964 de 2005, de conformidad con lo señalado en el artículo 49 de la citada ley”, le advierte el regulador.