Por Rolando Lozano Garzón
Medellín.- El grupo de alimentos colombiano Italcol adquirió el control sobre la compañía Carnes Casablanca S.A., al hacerse al 51% de las acciones en circulación de esta sociedad.
Se trató de una combinación de compra de acciones a los socios de Carnes Casablanca y una emisión de nuevos títulos de dicha firma.
El conglomerado comprador realizó las transacciones, a través de sus filiales Avanti Inmobiliario S.A.S.; Ancaro S.A.S.; Inversiones Real Estate S.A.S.; Licaro S.A.S.; e Inversiones GAF S.A.S.
Por su lado, Carnes Casablanca es una sociedad creada en 1993, que participa en el sector de carnes frescas, maduradas, frías y embutidos, a través de las marcas Casablanca y Carnelly.
Los fundadores de la compañía fueron los hermanos John Jairo; Javier Aníbal; Rubelio de J.; Luis Fernando; Rubén Darío (actual presidente); y Carlos Mario Lopera Arango, así como Lía Rosa Arango de Lopera.
En detalle, Carnes Casablanca procesa embutidos en una planta de la capital de Antioquia y también vende productos rojos empacados.
Igualmente, comercializa jamón de pavo y productos a base de carne de res y de cerdo en puntos de venta directos al público ubicados en los municipios de Medellín y Rionegro.
Tras Alimentos Cárnicos S.A.S.; Agropecuaria Aliar S.A.; Antioqueña de Porcinos S.A.S.; Cervalle S.A.; e Industria de Alimentos Zenú S.A. (del Grupo Empresarial Antioqueño), es la sexta empresa que más factura en Colombia en el segmento de embutidos cárnicos.
Consumo en baja
En el 2021, Carnes Casablanca registró ingresos operacionales, por $184.067 millones, con una disminución de 9,7%, contra el 2020, cuando se ubicaron en $204.000 millones
La menor facturación de la firma estuvo explicada, entre otros, a la caída en el consumo de carne de res debido al aumento de los precios de insumos importados como las sales minerales, que complementan la alimentación del ganado.
Y es que aunque el precio de la carne de res subió cerca del 30% creció el consumo de proteínas sustitutos como el pollo y el cerdo.
“Tras una caída durante los primeros meses de la pandemia de la covid-19, la producción y consumo de carne de res se mantuvieron constantes en el 2021”, dijo en marzo pasado el gremio Federación Nacional de Ganaderos (Fedegan).
De acuerdo con esta organización, en el 2021 el consumo per cápita local de carne de res fue de 17,3 kilos.
Sin embargo, la compra del alimento viene creciendo menos respecto a otros años (en el 2015 el consumo per cápita se ubicó en 19,1 kilos).
Generadora de buen empleo
En medio de esto, Carnes Casablanca cuenta con 548 trabajadores, de los cuales el 30% (135) son mujeres.
Desde un inicio con la primera tienda en el barrio Laureles innovó la forma de vender carne en La Tacita de Plata porque se dio la gran oportunidad de conocer la transformación y evolución del sector.
También inició con la investigación de la ciencia de la carne, la demanda del mercado, la variedad de posibilidades y recetas en el mundo de la charcutería.
Además de incursionar con los sellos Casablanca y Carnelly, elabora cerca de 60% de las marcas privadas de carnes frías de la nación.
La empresa también ha explorado en la producción de la carne y los desarrollos genéticos, a través de las firmas Porcigenes y Agropecuaria La Aguada.
Lo anterior le permitió control de calidad desde las granjas y ser una de las primeras compañías nacionales con certificación internacional.
Nació como ‘fama’
De esa manera, la empresa dejó de ser una carnicería en el barrio Manrique, también en Medellín, a uno de los jugadores ‘top’ de carnes frías, entre otros, para perros calientes, emparedados y sanguches.
Sin embargo, los orígenes de Carnes Casablanca datan de 1982, cuando incursionó en la actividad agroindustrial y comercial de proteína animal.
Por entonces, creó varias compañías alrededor y así se consolidó como un grupo que integra todo el campo de la ciencia de la carne, con desarrollos en genética (Porcigenes), Agropecuaria La Guada y la propia Carnes Casablanca .
En total, la organización cuenta con 800 colaboradores en sus áreas de equipo de investigación, desarrollo y producción en la planta de embutidos, que procesa 20.000 toneladas año.
Asimismo, es la factoría de mayor capacidad en madurados del país, elaborados artesanalmente.
Además de las tiendas Casablanca, los productos se comercializan en ‘hard discount’, minimercados, grandes cadenas y el canal institucional.
En particular son salchichas, chorizos, jamones, mortadela y butifarra.
Gran facturación
El pasado 27 de junio Grupo Italcol anunció el fallecimiento, a la edad de 94 años, del empresario Sebastiano Carbone Bellini.
El industrial había nacido el 20 de enero de 1928 en el seno de una familia de padre agricultor y madre dedicada a labores de hogar, en la localidad italiana de Spinazzola.
Sin embargo, al estallar la II Mundial, el joven tuvo que abandonar sus estudios de agronomía para ocuparse de los sembrados, aunque luego logró la validación de los estudios.
En 1957, Sebastiano Carbone se casó con la colombiana María Scarletti Rodríguez , con quien tuvo cuatro hijos (Angélica María, Liliana, Alberto — actual presidente de Italcol — y Juan Carlos).
La historia empresarial de Sebastiano Carbone Bellini en Colombia se inició en 1968 con la constitución de un negocio porcícola.
Sin embargo, sus crecimiento le permitió vender luego los animales y concentrarse en la elaboración de alimentos balanceados, constituyendo en 1970 a Italcol.
En detalle, Italcol S.A. y su filial Italcol de Occidente S.A. son compañías, que se dedican a la producción de alimentos balanceados para animales como bovinos, porcinos, bufalinos, equinos, peces, aves, perros y gatos, así como a la comercialización de materias primas (harina y aceite de pescado).
La organización cuenta con 20 plantas ubicadas en Colombia, Ecuador y Panamá.
Igualmente, produce dos millones de toneladas anuales de alimentos y cerca de 500.000 toneladas anuales de materia prima.
También cuenta con 1.800 distribuidores y 3.300 empleados.
La razón social de la empresa nació de conjugación de las sílabas iniciales de los nombres de los países de origen de los dos socios fundadores de la compañía.
En el 2021, Italcol S.A. e Italcol de Occidente facturaron $4,2 billones.
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