Medellín.- La Comisión Primera del Concejo de Medellín acaba de rechazar, en primer debate y en sesiones extraordinarias, la venta de las acciones que tiene Empresas Públicas de Medellín (EPM) en UNE Telecomunicaciones S.A, e Inversiones Telco.
Se trata de la cuarta vez, en igual número de intentos, en que la Alcaldía de Medellín es derrotada en su proyecto por medio del cual se busca activar la cláusula de Protección del Patrimonio Público a favor de EPM, es decir, desinvertir su participación accionaria en UNE e Invertelco.
La transacción del 50% de las acciones – el otro 50% + una acción está en manos de Millicom y que le da el poder administrativo de UNE Tigo – buscaba para EPM entre 2.3 millones de pesos y 2.8 millones de pesos. Si no vende, EPM alega tendrá que capitalizar a UNE en dos billones de pesos para la tecnología 5G (sólo en 2023 $500 mil millones), dinero que no tiene pues afronta $6 billones de déficit para inversión.
Se negó el Proyecto de Acuerdo 103 de 2022 por el cual se autoriza activar la cláusula de protección del patrimonio público a favor de EPM, con el fin de proteger el valor de la inversión pública que tiene en UNE EPM Telecomunicaciones S.A. y en Inversiones Telco S.A.S., en defensa de los recursos públicos que dicha inversión representa, y se dictan otras disposiciones.
La sesión estuvo a punto de fracasar, en medio de la presencia del Sintrasertic – Sindicato de Trabajadores de Servicios Públicos Domiciliarios y Tecnologías de la Información y las Comunicaciones – que con pancartas, megáfono y arengas se tomó el inicio de la discusión.
El presidente de la Comisión Primera del Concejo, Babiton Flórez Moreno, se vio obligado a amenazar con la actuación de las autoridades para sacar a los representantes de los trabajadores perturbardores que denuncian despidos inminentes, que fue apagado un megáfono y que se retirara de una valla la acusación de “ladrones” en contra de los concejales. Finalmente se consiguió aplacar los ánimos y tapar la palabra ofensiva.
EL “DRAG ALONE” – SALIDA NEGOCIADA DE UNE
UNE EPM Telecomunicaciones S.A., hace parte del grupo empresarial controlado conjuntamente por Millicom Spain S.L, Peak Record S.L., Peak Five S.L., Global Albion S.L. y Global Locronan S.L.
El acuerdo buscaba activar la cláusula de protección del patrimonio público a favor de EPM, para que puede vender su participación en UNE EPM Telecomunicaciones S.A. y en Inversiones Telco S.A.S.
El 14 de agosto del 2014 se perfeccionó la fusión por absorción de UNE con Millicom Spain Cable S.L A partir de dicha transformación, la naturaleza jurídica de UNE es la de una sociedad de economía mixta con participación pública mayoritaria.
Ese “drag alone” es un derecho consignado en favor de EPM en el Acuerdo de Accionistas suscrito con Millicom al momento de la fusión, en virtud del cual se le confieren a la empresa mecanismos sucesivos para la venta de su participación, respetándole a la vez la obligación de agotar el procedimiento establecido por la Ley 226 de 1995, al que está sometido como entidad pública. La vigencia de ese derecho va hasta el 14 de agosto de 2024.
Es habitual y usual que los socios pacten en los acuerdos de accionistas algún mecanismo de salida y en este caso no es la excepción. La cláusula de confidencialidad entre EPM y Millicom adoptó el derecho o cláusula de salida por el acuerdo de accionistas (drag alone)
UNE dio utilidades solo en el año 2019, sin embargo, tuvo un Ebitda positivo durante todos los períodos posteriores a la fusión, indicador que ha venido mejorando, pasando de un Ebitda de $1,3 billones en 2016 a $1,56 billones en el 2021.
Inicialmente la propuesta consistía en que el dinero de la venta sería destinado a fortalecer el Plan de Inversiones de EPM Matriz que asciende a $10.9 billones entre los años 2022 y 2024.
Las pérdidas han sido millonarias (acumuladas de $413.939 millones) y sólo al 31 de diciembre de 2021 registró un déficit de 572 mil millones de pesos.
Empresas Públicas de Medellín (EPM) tiene un derecho de salida en un plazo para ser ejercido por parte de EPM hasta el décimo aniversario después de haberse dado la fusión (la que tuvo lugar en 2014).
LA SALIDA NEGOCIADA
Finalmente la Alcaldía de Medellín no consiguió el respaldo en la Comisión Primera del Concejo de Medellín por cuatro de seis votos. El concejal del Centro Democrático, Sebastián López Valencia, que había anunciado previamente su apoyo, finalmente negó el voto necesario para el triunfo de la Administración del alcalde Daniel Quintero. Denunció de un aporte extraordinario de $1 billón para la próxima elección a la Alcaldía de Medellín.
Curiosamente el pasado 20 de septiembre el expresidente Álvaro Uribe Vélez anunció el respaldo de su movimiento político bajo una serie de condiciones (finalmente aceptadas por EPM) la principal de ella, que en el caso de que se venda UNE, todo lo recaudado entrará única y exclusivamente a un proyecto de inversión, no al municipio de Medellín (… “que se blinden los recursos de las manos del alcalde Quintero…”).
En esencia se exigió “cambiar un activo por otro”. La Junta de EPM autorizó la creación de EPM Renovables, una empresa dedicada a la generación de energía eólica, solar e hidrógeno verde con proyectos entre 400 megawatios y 700 megawatios.
La inversión debería ser vigilada por la academia – una universidad de alta acreditación Medellín por tres años -, y por una firma de auditoría internacional de verifique que vaya a la empresa de energías renovables.
La Alcaldía acordó retirar un artículo que según la oposición contradecía las condiciones de respaldo y que contenía la posibilidad que el dinero de la venta se destinara a cancelar parcial o totalmente el servicio de deuda de E.P.M.
“Artículo 6o. En los términos del artículo 4 de la ley 226 de 1995, los recursos que Empresas Públicas de Medellín E.S.P. obtenga de la enajenación se incorporarán a su presupuesto y serán administrados desde una o varias cuentas de destinación específica, para que se destinen al cumplimiento de su plan de inversiones y a cancelar parcial o totalmente el servicio de deuda asociada a éste.
Jorge Andrés Carrillo, gerente de EPM, defendió la propuesta y que la cláusula de salida permite fortalecer la posición de accionista para enajenar acciones e inyectar los recursos a la nueva empresa EPM Renovables.
Era la última oportunidad de la Alcaldía para conseguir la aprobación. Votaron a favor los concejales Babinton Darío Flórez Moreno, Aura Marleny Arcila Giraldo y Carlos Mario Romero Misas. En contra Daniel Duque Velásquez, Simón Pérez Londoño y Sebastián López Valencia. El empare impide que pase al segundo debate y se estima que ya no habrá más tiempo para realizar la venta.
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