Por Diana Nova, enviada especial – Villavicencio – Con orquesta y como todo un acontecimiento histórico, el Instituto Nacional de Vías (Invías) anunció la puesta en operación del nuevo viaducto en la Vía al Llano, una obra compuesta por seis apoyos, incluidos dos estribos, cuatro pilas y una pendiente de más de diez grados.
La concesionaria Coviandina, encargada de la administración de la Vía al Llano, informó que no recibirá el viaducto debido a fallas en su diseño. Ricardo Postarini, gerente de Coviandina, señaló que la pendiente de la estructura supera el 10 %, lo que, según la empresa, no cumple con las especificaciones técnicas requeridas y representa un riesgo para los usuarios.

Además, Primera Página conoció en el diseño estructural del puente de la discordia como también conoció que la discusión entre el Invías y el concesionario también incluye el costo del mantenimiento, pues según la entidad esto requerirá inversiones anuales por $3.000 millones y Coviandina advierte que la suma alcanza los $10.000 millones.
El viaducto cuenta con tres luces centrales de 180 metros cada una y dos de 90 metros, con una inversión total de $211.000 millones, distribuidos en dos contratos: $178.000 millones para la construcción del viaducto y la atención de 12 puntos críticos en la antigua vía 40MTA, y $33.100 millones para mitigación de afectaciones derivadas de los fenómenos de El Niño y La Niña.
La estructura ha generado inquietudes debido a su inclinación. La concesionaria Coviandina, encargada de la operación de la vía, ha manifestado su negativa a recibir la obra, argumentando que la pendiente supera el 10 %, lo que, según su criterio, representaría un riesgo para los usuarios.

Durante una mesa técnica de seguimiento sobre el corredor vial, Postarini explicó que esta inclinación, en el tramo cercano a Guayabetal, podría afectar la seguridad del tráfico y de los habitantes de la zona. En ese sentido, reiteró que Coviandina no aceptará la estructura mientras no se realicen los ajustes necesarios.
Por su parte, Invías respondió que el concesionario desconoce el contexto técnico del diseño del viaducto y afirmó que la estructura cumple con las normativas vigentes, incluyendo el Manual de Diseño Geométrico de Carreteras Invías 2008 y la Resolución 20213040041135 del Ministerio de Transporte, emitida el 13 de septiembre de 2021.
Según Invías, el diseño geométrico del viaducto fue modificado en concertación con la comunidad para reducir la velocidad de circulación de 50 km/ha a 40 km/h, lo que generó una variación en la pendiente en el tramo de llegada a Guayabetal. La entidad asegura que estos cambios se realizarán dentro de los parámetros técnicos establecidos y sin comprometer la seguridad de los usuarios.
A pesar de las discrepancias entre Coviandina e Invías, el viaducto entrará en operación sin un operador definido, lo que deja abierta la discusión sobre su mantenimiento y administración en el futuro.
Rifirrafe entre Gobierno y Corfi
El proyecto de construcción del viaducto del kilómetro 58 en la vía Bogotá-Villavicencio ha generado un cruce de declaraciones entre Proindesa y el director del Invías, Juan Carlos Montenegro.

Alberto Mariño, presidente de Proindesa, desmintió las afirmaciones del director del Invías, quien había indicado que el concesionario tenía toda la información suficiente para recibir el viaducto el próximo año.
Mariño señaló que, contrariamente a lo mencionado por Montenegro, Proindesa no cuenta con los planos de diseño del viaducto, fundamentales para evaluar el cumplimiento de las especificaciones y determinar su adecuación para la operación. Según el presidente de Proindesa, la obra que se licitó inicialmente fue modificada sustancialmente durante la construcción, y Coviandina, el concesionario responsable, no dispone de los documentos de diseño firmados por los responsables del estudio ni los del interventor del Invías que aprueban esos diseños.
Mariño aclaró que, para poder recibir el viaducto, se requieren los planos finales de construcción, junto con los resultados de los ensayos realizados, para que los especialistas del concesionario puedan analizar el cumplimiento de las especificaciones y determinar las condiciones de operación y mantenimiento del viaducto. En este sentido, destacó que no es posible pronunciarse sobre los costos de operación o los riesgos que el concesionario está dispuesto a asumir sin contar con dicha información.
Por su parte, el director del Invías, Juan Carlos Montenegro, destacó que el diseño cumple con la normativa vigente y que la inclinación fue ajustada en concertación con la comunidad sin afectar la seguridad. Sin embargo, en su declaración en la apertura de la estructura, enfatizó la importancia de respetar los límites de velocidad establecidos para la zona urbana de Guayabetal, fijados en 50 km/h y 30 km/h en áreas con interacción peatonal y dejó un mensaje entre líneas de cuidado y responsabilidad por parte de los conductores. “Sobre todo invitar a la comunidad y a los conductores a que colaboren en este proceso operativo de utilizar la vía, no sólo el viaducto, la vía en las condiciones de seguridad que les permitan llegar a casa sin ningún contratiempo. Estamos en una zona urbana, las zonas urbanas son 50 kilómetros por hora la velocidad máxima de circulación y cuando hay interacción con peatones como claramente lo tenemos en Guayabetal, la velocidad de circulación es de 30 kilómetros por hora para salvaguardar la vida de las personas”, manifestó Montenegro.

Pese a la falta de consenso sobre la administración futura del viaducto, Invías habilitó su operación mientras el contratista concluye trabajos complementarios en el retorno Villavicencio-Villavicencio. Se espera que las obras pendientes sean entregadas en febrero dentro del marco contractual.
Ir a inicio